Hemos vuelto. El receso duró tal vez más de la cuenta, pero las ideas no dejaron de ir y venir y volverse a ir, hasta que las más atractivas -por lo menos para mi- se quedaron rondando y me recordaban a diario que este espacio es la razón de buena parte de lo que hacemos y compartimos profesionalmente.
Era hora de recomenzar. Y había que hacerlo con nuevos bríos y algunos cambios.
La demora fue el germen -o la excusa- para intentar algunas variantes en el diseño y contenido del blog en esta nueva etapa.
El diseño
El nombre sigue siendo IPclick, que en esencia se traduce como propiedad intelectual en relación con los nuevos medios digitales. Ahora está centrado en la cabecera, en un fondo blanco. Los colores (amarillo y negro) se mantienen. Cambia, sí, la palabra click, que ahora tiene al final un puntero en negro como parte de letra k, que alude a la naturaleza del blog. Completa el cambio el punto en amarillo sobre la letra i.
Hemos sustituído la plantilla y el color de fondo sigue siendo blanco…o casi.
El contenido
Escribimos -y lo seguiremos haciendo- esencial pero no unicamente sobre derecho de autor. Es nuestra disciplina y lo que nos gusta hacer. Pero haremos énfasis en los nuevos medios digitales, y en las nuevas experiencias que usan contenidos creativos, tales como: la inteligencia artificial, robótica, realidad virtual, etc. Por supuesto, continuaremos escribiendo y compartiendo sobre los temas controversiales en relación con los medios sociales digitales, entre ellos la responsabilidad de los ISPs, «nuevo público», brecha de valor, licenciamiento multiterritorial de contenidos, etcétera.
Intentaremos en esta nueva etapa llegar y ayudar a las personas no especialistas, gente como tú y como yo, de cualquier edad, que tenga interés por la tecnología, se conecte a Internet a menudo, y por ello tengan dudas o inquietudes sobre lo que hacen a diario al conectarse con cualquier dispositivo.
Al escribir sobre los temas que nos atraen, procuraremos ser más sencillos, directos, visuales, gráficos. Pero no por ello menos rigurosos.
En fin, seguir avanzando en nuevas formas de hacer de la propiedad intelectual una expriencia tan simple como un click. No nos faltará entusiasmo para intentarlo. Y eso es todo.
Hemos vuelto.
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