¿No te ocurre a menudo que haces tantas cosas diariamente que al final del día estás agotado y sientes que has sido totalmente improductivo?…pues no estás solo.
En medio de la avalancha de reuniones de trabajo, llamadas telefónicas, correos electrónicos, interacción en las redes sociales, eventos sociales, laborales o académicos, sin contar los múltiples asuntos referidos a tu vida personal y familiar, muchas personas hoy viven lidiando con la falta de tiempo, pero sobre todo cada vez más con un deficit de atención.
Las personas hoy no atienden, escanean.
Por eso muchas veces andan tras la fórmula que los ayude a enfocarse, a ser más productivos, y por qué no: a incrementar sus relaciones personales y ser más felices.
Jeff Haden, en un artículo titulado: 8 Things You Should Not Do Every Day, identifica modos de actuar diarios nada productivos y sugiere formas de corregirlos. Cito acá algunas de esas recomendaciones con propósitos ilustrativos, con la convicción de que con un poquito de disciplina y ganas de hacerlo, podrías ponerlas en práctica. Como dice Haden, es por tu propio bien. Haz como dice y si eliminas esas cosas de tu día a día ganarás en productividad y serás una persona más feliz.
No prestar la atención debida a tu interlocutor
Y eso se materializa a menudo cuando decides, por ejemplo, contestar una llamada telefónica en medio de una conversación con un tercero, con lo cual das mayor importancia a lo que recibes vía telefónica que lo que estás viviendo o compartiendo de modo presencial, cara a cara. El mensaje que transmites a tu interlocutor es que lo que conversas y compartes en persona no es tan importante que no pueda ser interrumpido.
Con o sin la venia de tu interlocutor, eso es un desplante. También lo es no prestar la atención debida en el desarrollo de una reunión, pues no solamente es un acto de descortesía, sino también pierdes la ocasión de aprender mucho acerca del asunto de que dio origen a la reunión y sobre las personas que participan en ella. En cambio, si haces lo contrario será una gran ocasión para construir puentes con los demás y hallar maneras de hacerte indispensable para las personas que te interesan, dice Haden.
Cultivar relaciones tóxicas
Que no le aportan nada valioso a tu vida, y que más bien suelen ser unos obstáculos que entorpecen la dinámica de tu crecimiento personal y profesional. Las personas tóxicas paralizan, desestimulan y contribuyen con su actitud a la caída drástica de tus propios índices de productividad.
Usar el tiempo en agradar, no en construir
Créelo: El mundo puede arreglárselas sin ti. En cambio, tu familia y tus amigos, no. Es de buen vivir, entonces, restarle tiempo a los primeros e invertirlo en el cultivo y en el disfrute de los segundos. Las relaciones cuyo propósito es «encantar» como fin en si mismo, son estériles y poco duraderas. En cambio, las que se construyen basadas en el reconocimiento del otro y en su valía intrínseca, son la base de alianzas productivas y duraderas.
No enfocarte
No necesitas conocer inmediatamente que has recibido un e mail, un texto, o una mención en twitter o cualquiera otro asunto que te llegue vía tu teléfono inteligente o computadora. No permitas que todo eso te desvié, te distraiga. Bastaría con que los programes y vayas a ellos justo en el momento en que han de recibir el cien por ciento de tu atención, según tu propia agenda.
Si algo es muy importante para ti, entonces es importante que lo hagas sin interrupciones. Enfócate en lo que estas haciendo. Enfocarse en lo que tú estás haciendo es mucho más importante que enfocarse en lo que podrían estar haciendo los demás, afirma Haden.
Y concluye con esta recomendación: no dudes al emprender pues más allá del éxito, está tu propia convicción de que darás lo mejor de ti al hacerlo, y con esta otra: si tienes que decir No, pues hazlo, no digas Sí cuando estás pensando lo contrario.
Cuando dices no, te sentirás mal por un momento. Cuando dices sí a algo que no quieres hacer, te podrías sentir mal por largo tiempo.
Estas son algunas de las ideas desarrolladas por Jeff Haden en inc.com.
¿Te animas a agregar otras más?
Me pareció muy interesante el artículo especialmente el último consejo en donde invita a mejorar la concentración. Creo que las interrupciones diarias son el enemigo #1 de la productividad y en la medida que aprendamos a reducirlas, mejoraremos notablemente nuestra eficiencia en todo lo que hagamos…
Aprovecho para compartir un artículo sobre este valioso tema que podría ser de interés para los lectores de este sitio..
http://www.glidea.com.ar/blog/como-ser-mas-productivo-y-eficiente-en-lo-que-haces